Analizamos el personaje de Harley Quinn, la supervillana y anti-heroína de DC que tiene su propia saga de cómics

Si en algo están de acuerdo gran número de seguidores del Universo DC, es que Harley Quinn no es una villana cualquiera. De hecho a partir de su aparición en “Batman: La Serie Animada”, la popularidad de Haley Quinn no ha dejado de crecer. Creada por Bruce Timm y Paul Dini, apareció en DC cómics en 1992, en el episodio nº 22 de la mencionada serie. 

Su personaje se acabó consolidando en 1994, en el cómic The Batman Adventures: Mad Love. Poco después,y en 1999 pasó a engrosar la fila del Universo DC, concretamente en la saga Tierra de Nadie. Fue una adaptación de su origen en la novela gráfica Mad Love, y desde entonces el ascenso de la atlética villana fue imparable.

Tanto es así, que se convirtió en personaje recurrente en las historias de Batman y acabó consiguiendo su propia serie. En Norma Cómics pueden encontrarse los cómics más destacados de esta singular anti-heroína.

El cómic Haley Quinn, serie mensual con el nombre de la villana, vio la luz de la mano de DC Comics. La saga constaba de 28 números entre los años 2001 y 2003, finalizando con el regreso de Harley al Asilo de Arkham. 

La historia de Harley Quinn

El mismísimo Batman no dudó en destacar a Harley como una rival a muy a tener en cuenta. A ello la ayudan un conjunto de habilidades que, siendo muy dispares entre sí, tejen una poderosa red. Y quien cae en ella… no la podrá romper fácilmente. A sus habilidades de gimnasta destacada, que le llevaron a conseguir una beca en su juventud,  se une su destacada inteligencia.

Harley Quinn, originariamente llamada Harleen Quinzel antes de convertirse en villana, consiguió matricularse en la universidad de Gotham. Profundamente interesada por la psique humana y sus entresijos, se especializó en psiquiatría bajo la tutela del doctor Odin Markus. 

La preparación de su tesis la hizo sobre ella misma y su antigua relación sentimental con Guy Kopski, muerto por disparo. El objetivo de Harley era hacer su residencia en el Asilo Arkham, y lo hizo tratando nada menos que a Joker.  Estudiosa como era de la psique de los asesinos en serie, le asignaron sin restricciones al payaso retorcido por excelencia.  

El encuentro entre ambos fue un auténtico cóctel explosivo: la psiquiatra atraída por lo oscuro, y el payaso asesino. Todo empezó con un giño de ella, cuando le pidió a Joker que la llamara Harley Quinn, en referencia a Arlequín. Él en un principio trató de estrangularla, pero se detuvo al leer en los ojo de ella amor en lugar de miedo. El romance fue inevitable y marcó el comienzo de la carrera criminal de Harleen, que ayudó a Joker a escapar.

Las habilidades de la psiquiatra más villana

Aunque aparentemente lo que más destaca en Harley son sus habilidades como gimnasta, su arma más peligrosa es seguramente su inteligencia. Si bien sus piruetas y saltos extremos la ayudan en la lucha, usa su entrenamiento en el psicoanálisis para manipular al enemigo. Y aunque debido a su relación con Joker a veces sufre demencia, la utiliza como arma que la hace doblemente peligrosa. ¿Hay algo más letal que una psicópata inteligentísima…?

Otra de sus particularidad es su inmunidad al veneno y otras toxinas, incluyendo el gas de la risa de Joker. Adora usar armas durante la lucha, que combina con polvos tóxicos para reducir a sus rivales.

Uno de sus signos de identidad más característicos en su vestimenta, que jamás ha variado en ningún cómic DC: un traje de bufón. Unicamente en algunos videojuegos su ropa ha variado. Y su peinado también es siempre el mismo: dos coletas aparentemente ingenuas, que pueden variar de color. 

Y en lo que respecta a su equipo, no faltan razones para temerla: martillo, pistola, cañón muñeca asesina y bate. 

Como decía en un de sus citas más famosas: «Soy conocida por ser bastante irritante. Te estoy avisando”. No exageraba.